sábado, 4 de septiembre de 2010

Llaman


Llamó una vez, no abrí. La segunda vez abrí y se quedó para siempre.
Era el cartero

15 comentarios:

  1. :o) Muy simpático.
    Muy buena elección la de Debussy! Tengo debilidad por su música, pero es que sus obras son preciosas.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Si es por llamadas mi cartera se quedaba fijo, un día me quema el timbre :-)

    ResponderEliminar
  3. Buen guiño (guiñito), Ana.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  4. Y eso que estabas advertida de que los carteros llaman dos veces.

    ResponderEliminar
  5. ...y todo eso en 16 palabras. Impresionante.

    Un beso de domingo cansado.

    ResponderEliminar
  6. 17 Kum!
    Gracias, mi cartero viene a comer todos los días :)
    Abrazos

    ResponderEliminar
  7. Claro, hubiera estado mal abrirle a la primera y romper el encanto de la segunda llamada. :-)
    Saludillos

    ResponderEliminar
  8. Un cartero nunca sabe lo que le puede esperar tras una puerta. O quizá llevaba toda su vida esperando que se abriera para quedarse...

    ResponderEliminar
  9. Ja, ja..... y encima sabe cocinar.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  10. ¿Aquí también hubo sexo en la mesa?
    Un beso

    ResponderEliminar
  11. ja ja ja, ¿de verdad quieres saberlo o lo puedes imaginar?

    ResponderEliminar
  12. Siempre el cartero "ring twice"...contrario al lechero...Muy bueno este pequeñín! Saluditos.

    ResponderEliminar
  13. Al lechero mejor abrirle a la primera... Héctor
    Bicefalepena, solo porque era el cartero, no hay que tentar la suerte!
    Puck, es que tiene encanto la segunda llamada, sin duda.
    Pablo, esperar a que abran a la segunda ¿es la realización del cartero?
    Fortunata, es que el cartero fue cocinero antes que fraile, o después, ¿no era eso?

    ResponderEliminar

Si quieres, deja tus huellas al andar por mi casa.

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...