Se levanta a las 3:00, camina hasta el reloj de cuco del salón y lo atrasa. Una hora exacta. Cada hora. Desde entonces nadie despierta, el sol no sale, los pájaros no cantan, el mundo permanece eterno en esa hora que regresa una y otra vez.
Mejor, hubiéramos creado anoche un buen momento de esos que flotan solos sin apoyarlos, y nos quedamos allí parados. Un abrazo. (lo apuntare en la agenda para 2013....)
¿Atrapado en esa hora o atrapando esa hora para que no pase? En estos juegos temporales siempre me pregunto quién atrapa a quien. Al margen, me gustó mucho. Bsts
Odio los cambios de hora, pero esta manera de conseguir la eternidad me ha encantado. El tiempo se detiene y no puede avanzar con ese personajillo que hora tras hora atrasa el reloj. Nos gustaría ser dueños del tiempo, pero el tiempo no pertenece a nadie, se nos escapa siempre. Hoy vivimos una hora más, ¿no? Para que en primavera nos la quiten. Ya se sabe, lo que suma, resta. Besos
A lo mejor la magia está en el reloj de cuco... A mí siempre me han parecido mágicos y escandalosos :-) Me ha gustado ese mundo que permanece eterno. Besitos guapa
Qué cosa rara eso de los cambios horarios... y todo sigue su curso sin reloj, sin tiempo y nosotros intentando medirlo casi como de prepo... Bellísimo, Anita. Saludos van
Leí en algún sitio que el tiempo empezó a ser importante con la llegada de los trenes, para saber a qué hora ir a buscar a la familia, claro! Un abrazo
Mejor, hubiéramos creado anoche un buen momento de esos que flotan solos sin apoyarlos, y nos quedamos allí parados. Un abrazo.
ResponderEliminar(lo apuntare en la agenda para 2013....)
Si, a veces dan ganas de crear momentos en los que quedarse parado... un abrazo por ejemplo
EliminarPara ti!
Ahora mismo tengo un instante en mente en que me encantaría que ese bucle sucediera... Un beso y otro beso y otro y otro.
ResponderEliminarEso, un bucle de amor es lo mejor que puede pasar, pero siempre de 2 a 3, o de 3 a 2
EliminarAbrazos
Con este micro has atrapado ese instante de la vida que todos querríamos revivir cada hora, Anita.
ResponderEliminarEl protagonista se ha quedado en las tres, yo en una hora distinta, pero ahí me has dejado deseando.
Un abrazo,
Lo malo, Pedro, es que nos pilla a todos dormidos, salvo algunos que se levantan a cambiar la hora.
EliminarUn abrazo
Un instante de magia y noche infinita... Pena que estemos todos durmiendo para verlo.
ResponderEliminarMuas!!!
Bueno, pero dormimos mucho a pierna suelta!!!
EliminarBesos
¿Atrapado en esa hora o atrapando esa hora para que no pase? En estos juegos temporales siempre me pregunto quién atrapa a quien. Al margen, me gustó mucho.
ResponderEliminarBsts
Ah, ahí decides tú, si quieres atrapar o ser atrapada. Yo solo escribí.
EliminarBesossss
Original forma de recibir el nuevo cambio horario.
ResponderEliminarUna perta.
Si, es una fecha muy dada a las musas.
EliminarUn abrazo
Una eternidad inquietante. Me gusta la neutralidad de la voz.
ResponderEliminarBesos
Si, Susana, eso creo que me gustan, las voces ajenas.
EliminarBesos
Pero si cada vez que llegan las tres, lo retrasa una hora, acabará saliendo el sol de madrugada.
ResponderEliminarUn abrazo, Ana,
Esa es la otra opción, pero no la escribí yo. Quizá por eso sale el sol de medianoche en los polos...
EliminarUn abrazo
Odio los cambios de hora, pero esta manera de conseguir la eternidad me ha encantado. El tiempo se detiene y no puede avanzar con ese personajillo que hora tras hora atrasa el reloj. Nos gustaría ser dueños del tiempo, pero el tiempo no pertenece a nadie, se nos escapa siempre.
ResponderEliminarHoy vivimos una hora más, ¿no? Para que en primavera nos la quiten. Ya se sabe, lo que suma, resta.
Besos
A ver qué se nos ocurre en primavera, Puri. A saber si no hay personajillos del tiempo... yo creo en ellos ¿y tú?
EliminarBesoss
A lo mejor la magia está en el reloj de cuco... A mí siempre me han parecido mágicos y escandalosos :-)
ResponderEliminarMe ha gustado ese mundo que permanece eterno.
Besitos guapa
Si, Rocío, qué bueno que te fijes en eso, para mi era esencial que fuera de cuco.
EliminarBesitos
A veces, sólo a veces, me gustaría quedarme en una hora eterna.
ResponderEliminarBesos guapetona!
Si, solo a veces, si pudiéramos elegir... "reloj, no marques las horas..."
EliminarAbrazos
Tiene algo especial este micro tuyo Anita, un brillo distinto. Me ha encantado.
ResponderEliminarun abrazo
Gracias, Paloma. El tiempo ahora tiene un brillo distinto... de lluvia!
EliminarAbrazos
Muy de actualidad. Saludos. Muy de actualidad. Saludos. Muy de actualidad. Saludos...
ResponderEliminarLo has pillado, Cybrghost! Creo que te quedaste entre las 2 y las 3, o entre las 3 y las 2, quién sabe!
EliminarAbrazos
Y a pesar de todo, en el texto el tiempo sigue pasando. Quizá sea el titulo. Abrazos.
ResponderEliminarA pesar de todo, en algún momento se dormirá el personaje y despertará el mundo, ya verás, hay que estar atento!
EliminarAbrazos
Qué cosa rara eso de los cambios horarios... y todo sigue su curso sin reloj, sin tiempo y nosotros intentando medirlo casi como de prepo... Bellísimo, Anita. Saludos van
ResponderEliminarLeí en algún sitio que el tiempo empezó a ser importante con la llegada de los trenes, para saber a qué hora ir a buscar a la familia, claro!
EliminarUn abrazo