Es muy bueno porque con muy poco refleja la dureza de esa situación y el conformismo (expresado por el uso del presente) de las personas que la sufren.
Bravo, Ana. Poco que añadir a la contundencia del texto. Tiene, además, una trascendencia muy jugosa de la que se podría hablar largo y tendido. Genial. Un abrazote grande.
Muy bien, Ana. La violencia doméstica precisa de estas formulaciones exactas para que funcionen como faros en nuestra sociedad. Un fuerte abrazo desde el 2011, PABLO GONZ
Además de contundente e impresionante, por lo mucho que dice en pocas palabras, el símil está genial. El Vaticano sigue mirando para otro lado en este tema inconfesablemente. Abrazos.
Muchas gracias a todas y todos, las musas asaltan en cualquier momento y hay que estar atento para no perder el susurro... El Vaticano atiende sus propios intereses, entre los que está más el matrimonio que la dignidad. Abrazos fuertes!
Impactante y directo, un juego de palabras que espero de para que algunos tengan...su cargo de conciencia. Un beso.
ResponderEliminarPrimero morí de risa, sin embargo es muy profundo y ojalá no haya liturgias domésticas en el mundo, está genial Anita felicidades
ResponderEliminarJoder, Ana... impresionante. Mi sombrero... uno así de grande.
ResponderEliminarNo se puede ser más contundente con menos palabras.
ResponderEliminarEs muy bueno porque con muy poco refleja la dureza de esa situación y el conformismo (expresado por el uso del presente) de las personas que la sufren.
ResponderEliminarUn beso
De directo que es casi duele, es potente y perfecto.
ResponderEliminarUn beso.
Impresionante.
ResponderEliminarCon el tiempo no esperará ni al vino o lo tomará después... arrepentido.
Un abrazo
Bravo, Ana. Poco que añadir a la contundencia del texto. Tiene, además, una trascendencia muy jugosa de la que se podría hablar largo y tendido. Genial.
ResponderEliminarUn abrazote grande.
Sra. Dinamita, mire usted mis brazos... !cómo escarpias! Buenísimo.
ResponderEliminarSaludos.
Muy bien, Ana. La violencia doméstica precisa de estas formulaciones exactas para que funcionen como faros en nuestra sociedad.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo desde el 2011,
PABLO GONZ
Qué fuerte Anita, contundente y fuerte... Un beso.
ResponderEliminarComienzas con fuerza el año. Pocas palabras pero directas a donde más duele.
ResponderEliminarEnhorabuena.
Un saludo indio
Y mira que se ha escrito sobre el tema, pero tú lo renuevas con un microrrelato excelente.
ResponderEliminarBesos, mil.
Buenísimo Ana, duro, con la dureza que exige el tema.
ResponderEliminarBesos, feliz 2011.
Un solo golpe, un gancho.
ResponderEliminarMuy bueno, un abrazo.
Además de contundente e impresionante, por lo mucho que dice en pocas palabras, el símil está genial. El Vaticano sigue mirando para otro lado en este tema inconfesablemente.
ResponderEliminarAbrazos.
hostiaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaasssssssss, ¡qué bueno! Sí señora, de lo mejor que he leído últimamente, bueníiiiiiisimo. Enhorabuena
ResponderEliminarBUEN juego de palabras.
ResponderEliminarMuchas gracias a todas y todos, las musas asaltan en cualquier momento y hay que estar atento para no perder el susurro...
ResponderEliminarEl Vaticano atiende sus propios intereses, entre los que está más el matrimonio que la dignidad.
Abrazos fuertes!
Y lo más fuerte es que nos lo cuentas y no te vas.
ResponderEliminarGenial nano, Anita. Me gustó mucho.
Un beso.