Los primeros jueves de mes de esta primavera se llenan los blogs de Microrrelatos indignados, en algunos casos ilustraciones, gracias a la propuesta de los blogs La colina naranja y Explorando Lilliput. La forma de expresión no importa mientras sepamos lo que queremos decir.
El cuarto oscuro
Hoy he visto las noticias. Las mentiras son tan grandes que no caben en la tele. Las narices crecen a ritmo vertiginoso y la pantalla toma relieve, ya tengo donde colgar el bombín negro que compré para enterrar al abuelo. Imagino una sala donde estén todos y los introduzco en ella uno a uno, igual que de joven fantaseaba con meter a los hombres que me gustaban en un cuarto oscuro, solo para mí. Hago arder la habitación. Después duermo tranquila.
Mentiras que crecen sin necesidad de que nadie las riegue...
ResponderEliminarMe gusta Anita tu indignación.
Un abrazo
Es bueno, de vez en cuando hay que prender algún fuego, sólo por el gusto de ver como arde...
ResponderEliminarBesicos Anita.
Yo llevo las cerillas...
ResponderEliminarBesos indignados desde el aire
Anita, las mentiras no cabrían ni en mil cuartos oscuros. Dinero para paliar esta crisis hay, ganas de resolverla poquitas, por lo menos hasta que no pasemos por el aro y reduzcan lo que les venga en ganas. Olvidémonos a este paso de cualquier bienestar que no sea trabajar y dormir, o solo trabajar.
ResponderEliminarYo pongo la gasolina para el incendio.
Abrazos.
Y con todo el descaro del mundo. Ya ni se molestan en evitar que se les pille. A ese grado de chulería han llegado.
ResponderEliminarApoyo tu propuesta.
Besos indignados.
Cuando comento sobre la crisis Española, no me queda más que poner de referencia nuestra crisis Argentina del 2001.
ResponderEliminarEsa vez surgió un lema que recorrió cada garganta: "Que se vayan todos" (los políticos, claro)
Bueno, pasados diez años, no se fue ninguno. Es más, siguen ocupando sus lugares sagrados.
Así que, por experiencia, recomiendo que busquen una sala lo suficientemente grande y sigan la propuesta del hermoso micro de Anita.
¡Saludos!
¡Apoyo tu propuesta! y además pongo las cerillas y lo que haga falta...
ResponderEliminarBesitos
Me gusta medir las mentiras en pulgadas. Las llamas están por llegar, pero no se podrá evitar, están ciegos.
ResponderEliminarSigan, sigan viendo la tele. Y no se preocupen, el mundo se cambia solo.
ResponderEliminar...unos minutos para la publicidad...
Yo pongo la habitación de los trastos y así mato (léase quemo) dos pájaros de un tiro (dos es un decir).
ResponderEliminarMe alegro de este encuentro, Anita. Creo que tenemos mucho amigos en común y ya iba tocando.
Otro abrazo (aún contenido)
Cuenta con las cerillas que necesites, la cuestión es acabar con los mentirosos.
ResponderEliminarUn abrazo,
El problema es que se les dió el mejor abono para plantar sus mentiras. Ahora crecenfuerte y vigorosas sin que nada ni nadie les pueda atacar.
ResponderEliminarSaludos.
Muchos, casi todos, todos en realidad, queremos hacerlo, Anita Dinamita. Cada uno de nosotros tiene en su país de origen a ciertos mentirosos saliendo de la televisión. Ojalá existiera un cuarto para fósforos o cerillos y muchos indignados haciendo fila en busca de tranquilidad, pero he ahí el problema. ¿Si podremos dormir luego solo con esta acción?
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu micro; rezuma enfado, gracia y muy buen hacer; todo un micro indignado, sí señor. Enhorabuena!
ResponderEliminarBesos,
Carmen.
Es una lástima, Ana, que hayas tenido que incendiar una habitación. Quizá las mentiras hasta ese momento sean cenizas ahora. Pero ¿se ha eliminado la estirpe maldita que las produjo? Huy no..., no quiero sentirme paranormal esta mañana.
ResponderEliminarUn gustísimo leer tu micro indignado :-)
Hey, dicen que Pilar Miró cumplió una fantasía parecida, quedó con todos sus ex para cenar antes de morir, lo que no se sabe es qué hicieron allí todos juntos, me imagino las caras cuando acudieran a la cita y se vieran compartiendo mesa. ¿Qué diría en el discurso? Besos, Ana.
ResponderEliminarArgh, ojalá fuese tan fácil, de mil amores te ayudaba con las cerillas :-)
ResponderEliminarQué buena esa imagen, puedo ver toda una panoplia de bombines colgados de las narices retorcidas de los pinochos.
Besos.