–La noche es una estrella en tu cucharilla –repetí asqueado.
–Parece realmente grave, vamos a tener que hacerle más pruebas –continuó, dirigiéndose a la enfermera.– Tome muestras de saliva, sangre y semen. Y tramite su ingreso, tiene que quedarse en cuarentena. Estas patologías son muy contagiosas.
Cerró el expediente y concluyó entre suspiros, mientras miraba a la enfermera marcharse:
–Sus ojos son los luceros que guían mis anhelos.
Con este relato he participado en el concurso de la primera semana de ReC
Anita, un galeno muy poético. La frase complicada a más no poder, pero te quedo muy bien.
ResponderEliminarAbrazos.
Lo peor no son los desvaríos poéticos que le dan. ¡Es que le pida a la enfermera que tome muestra de semen!. ¡Que se la tome el mismo!.
ResponderEliminarOtra propuesta estupenda, entre el tono realista y ese poético e irreal entorno médico. La frase del final me encanta.
ResponderEliminarUn abrazo
Más y más pruebas en vano, con un lápiz y un papel podría solucionarse todo...
ResponderEliminarBesos.
HD
Jeje, una mezcla rara, rara, medicina y lírica no casan bien. Pero tu has conseguido un milagro y sin pastillas...
ResponderEliminarBesos desde el aire
muy bueno.
ResponderEliminarsi tienes un rato te invito a visitar mi blog.
un saludo maca
http://karmucaycuquino.blogspot.com/
Tiene una indigestión de poesía. No le hace falta que lo analicen tanto, solo un poco de rock duro para compensar.... :)
ResponderEliminarJajaja, original si que te ha salido, sí, qué mezcla: médico y poesía.
ResponderEliminarBesitos
Muy bien rematado, a mí también me gusta el párrafo final (no está tan loco el doctor, está enamorado).
ResponderEliminarjejeje, muy buena idea, me recuerda a un corto en el que un tipo se levanta un día y descubre que sólo puede hablar cantando
ResponderEliminarNICOLÁS, el toque cómico que le hacía falta a esta frase... no suelo concursar, pero a veces está bien ejercitarse.
ResponderEliminarCYBRGHOST, no estaría mal, pero ese tipo de trabajos no los hacen los médicos, deberías saberlo ;)
PALOMA, me costó encontrar una frase final que estuviera a tono con la pandemia, je je. Gracias
HUMBERTO, igual no entendiste... o quizá la poesía de pronto un día brote y no podamos pararla, uf, qué miedo.
ROSA, no casaban hasta ahora, je je, seguro que hay médicos poetas, pero escondidos. Mira Jorge Drexler, es otorrino...
Karmucaycuquino, gracias por pasar, iré a visitarlo, saludos!
MONTSE, como tratamiento suena muy bien!
ELYSA, si, una mezcla explosiva... ¿le habrán contagiado?
BEATRIZ, bueno, no está loco nadie, solo un poco enfermitos... y que le gusta la enfermera está claro ¿has visto qué guapa es?
JAIME, por ahí van los tiros... hay una enfermedad muy curiosa que no puedes hablar bien salvo que cantes o recites poesía, creo que lo llaman "la enfermedad de Dilbert" porque la tenía su dibujante, pero no sé si estoy patinando.
Gracias a tod@s, abrazos y cuidado no se me resfríen!
Me ha gust ado much. Ahora bien, creo que si hubieras quitado lo de "sagre , orina y semen" y lo hubieras dejado en muestras o análisis hubieras tenido más posibilidades. Que son muy suyos los de la radio...
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