martes, 12 de noviembre de 2013

Despedida



Avísame cuando dejes de quererme. Cuando ya no te inunden mis recuerdos, cuando se te haya escapado el olor de mi nuca y no me puedas ver corriendo por el jardín. Avisa cuando nuestras canciones solo sean música, cuando el color azul no sean mis ojos y el delantal repose desnudo en el colgador. Me bastará con que una noche, mientras nos lavamos los dientes, me preguntes ¿perdona, te conozco de algo?

21 comentarios:

  1. Ufffff Anita, ufffff!!!
    Un gran final.
    Besos desde el aire

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ufff Rosa, así es la vida. O no.
      Besazos para ti, por tierra, mar y aire.

      Eliminar
  2. Ese punto final sobra ;). Se me rompe el ritmo en la tercera frase, creo que quedaría mejor añadir ahí también el "cuando". Así: "Avísame cuando dejes de quererme. Cuando ya no te inunden mis recuerdos, cuando se te haya escapado el olor de mi nuca y no me puedas..."

    Este es un micro de doble lectura: quiero decir, que necesita una lectura sosegada tras la primera lectura, para asimilarlo bien.

    Me gusta.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo que dices de la tercera frase lo escribí así y luego lo cambié :)
      Gracias, Inés.
      Abrazos

      Eliminar
  3. Veo un círculo en ese final, un nuevo comienzo. Me gusta, aunque sea un relato amargo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, ojalá un nuevo comienzo. Muy positivo te veo.
      Besos

      Eliminar
    2. Lo vi, me vino así ¿positivo? Te puedo asegurar que menos que nada aún.

      Eliminar
    3. Tienes razón, esa curiosidad en mitad del baño puede ser el principio de algo ;-) Yo no lo había visto.

      Eliminar
  4. Los olores nunca se van del todo, aunque no los recordemos.
    Besos Anita.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues mira que los olores son lo más difíciles de recordar, pero cuando llegan por algún motivo te hacen llegar el momento exacto.
      Un beso grande!

      Eliminar
  5. Lo dicho Anita: Poesía en estado puro. En todos tus relatos brilla esa poetisa que llevas dentro y que puja por salir. Felicidades

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cada día tiene que empujar menos, Peña. Qué alegría verte por aquí. Te dejo una butaca de terciopelo para que estés cómoda.
      Besos

      Eliminar
  6. Texto poético hasta decir basta. Que no lo digo porque me encanta. Si es que rezumas poesía, Ana. Y de la buena.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mil gracias, Araceli. No sé qué le pasa a mis musas en otoño, que se ponen tontorronas.
      Besazos

      Eliminar
  7. Maravilloso al extremo, Ana. Coincido totalmente en que es un relato circular que pinta un panorama muy alentador, aunque el ciclo se repita infinitamente. Me parece perfecto, ¿qué más decirte?
    Te disparo mis felicitaciones y mi envidia, a quemarropa.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me alegra ese panorama alentador, de verdad. Pero llega un día, a veces, que no te conoces.
      Disparas bien, me has dado. Sobre todo con el abrazo.
      Otro para ti directo al alma.

      Eliminar
  8. Me gusta cuando te pones extremadamente exagerada, porque no pierdes un ápice de poesía ni de verdad.

    Un abrazo, Ana.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Exagerar hace que se entienda mejor. Me lo digo un maestro. Y cómo me gusta.
      Un abrazo, Miguelángel.

      Eliminar
  9. Que preguntas haces. Anda deja me que se me quema la comida!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No te laves los dientes antes de comer, hombre.
      Besos (te envié un mail, contéstame, porfi)

      Eliminar

Si quieres, deja tus huellas al andar por mi casa.

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...